La idea de que los gatos sienten amor es objeto de un intenso debate. Comprender cómo se comunican los gatos es fundamental para entender cómo demostrarles tu afecto y cómo ellos demuestran su afecto hacia ti.

Los gatos no entienden los besos como los humanos, ya que interpretan las emociones y comunican afecto de forma muy diferente a nosotros. Sin embargo, muchos gatos saben que el beso es una forma humana de demostrar amor y respeto.

Es fundamental comprender el significado del lenguaje corporal y el comportamiento de tu gato. Por eso, profundicemos en este tema y exploremos cómo los gatos dan y reciben amor y besos.

Los gatos se demuestran amor y afecto entre sí y a los humanos mediante el lenguaje corporal. Si bien no se besan en el sentido tradicional, tienen muchas otras formas de expresar afecto.

Los gatos muestran afecto mediante:

• Cabezazos
• Paliza
• Frotamiento
• Usando sus colas
• Parpadeando lentamente, abriendo y cerrando los ojos.
• Amasadura
• Dormir sobre o al lado de las personas que aman.

Los cabezazos y las caricias son la forma que tienen los gatos de marcarte como uno de ellos. Tienen glándulas odoríferas en las mejillas y los labios, que utilizan para dejar su olor en ti a través de feromonas, una señal de que te ven como parte de su grupo social y de que sienten un apego y afecto positivos hacia ti.

Lamer es lo más parecido a un beso que da un gato y, en realidad, es un comportamiento de acicalamiento que suelen reservar para su propia especie felina. Si tu gato te lame o te acicala, es una señal de que te acepta como parte de su grupo social y una forma de demostrar respeto y afecto.

El parpadeo lento de los ojos desde el otro lado de la habitación es algo con lo que la mayoría de los dueños de gatos están familiarizados, y es la forma que tiene un gato de decir "te amo" sin ningún contacto físico.

Los gatos responderán positivamente si les gusta que los besen. Su lenguaje corporal le mostrará que están relajados y contentos, y podrían hacer algunas de estas cosas:

• Parpadeando lentamente mientras te miro
• Levantando la cabeza o inclinándose hacia adelante, con las orejas hacia arriba.
• Ronroneando
• Cabezazos
• Frotamiento
• Paliza
• Levantando su cola y envolviéndola a tu alrededor

Los gatos son capaces de entender que los besos son una muestra de amor, aunque besar no sea parte de su lenguaje corporal habitual. En el mundo de los gatos, frotar su olor sobre las personas que aman y recibirlo de los demás es un intercambio de afecto. Los gatos pueden interpretar un beso humano de manera similar: estamos haciendo contacto físico y dejando nuestro olor sobre ellos.

Si tu gato no quiere que lo beses, ¡te lo hará saber pronto! Las señales de que no quiere recibir esta muestra de cariño son:

• Vocalización/maullidos
• Silbido
• Orejas planas y hacia atrás
• Te golpean o te golpean
• Movimiento rápido de la cola

Si tu gato muestra alguno de estos comportamientos cuando lo besas, debes detenerte y alejarte para darle espacio. Si sigues besándolo o haciendo algo con lo que no se siente cómodo, esto provocará estrés no deseado e incluso podría debilitar el vínculo entre tú y tu gato.

Por supuesto, tu gato necesitaría pasar por muchas experiencias incómodas para llegar a este punto, pero aun así debes aceptar las señales que te da cuando no le gusta algo.

A la hora de besar a tu gato, hay algunas cosas que debes tener en cuenta para asegurarte de que respetas su espacio y, al mismo tiempo, proteges tu salud. ¡A continuación, te contamos qué hacer y qué no hacer al besar a tu gato!

1. Nunca beses a los gatos en los labios : en primer lugar, esto puede ser una invasión excesiva del espacio personal de tu gato. Pero, en segundo lugar, los gatos son portadores de bacterias y parásitos que pueden transmitirse a los humanos a través de su saliva. Por lo tanto, ¡siempre es mejor evitar la zona de la boca al besar a tu gato!
2. No beses a un gato que no conoces : no a todos los gatos les gusta que los besen y, hasta que conozcas a un gato y él te conozca a ti, es mejor no pasarse de la raya y acercarse demasiado, ya que podrías estresarlo.
3. No dejes que los niños besen a los gatos : es fundamental enseñarles a los niños cómo comportarse con los gatos y cómo respetar su espacio. Además, a tu pequeño probablemente le encante pasar tiempo con su mascota. Sin embargo, algunos gatos son menos tolerantes con los niños y también existe un mayor riesgo de que un niño reciba un arañazo en la cara si al gato no le gusta que lo besen.

Si bien los besos no forman parte del lenguaje corporal normal de un gato, los miembros de nuestra familia felina son capaces de entender un beso como una muestra de amor y afecto. Aunque los gatos se comunican de manera diferente con nosotros, aprenden a entender un beso y a muchos gatos les encanta recibirlos.

Sabrás que a tu gato le gustan tus besos si ronronea, o si levanta la cabeza, te da cabezazos, frota su cuerpo o cola contra ti y quiere estar más cerca de ti. Sin embargo, un beso puede no ser la manera de llegar al corazón de tu gato; no todos los gatos responden positivamente a un beso y prefieren recibir amor a través de caricias, acicalamiento y alimentación.

También puedes demostrar amor y afecto hacia tu gato aceptando y recibiendo sus lamidas, cabezazos y frotamientos a tu alrededor, ya que esta es su forma de transferirte su olor desde sus glándulas odoríferas.